Existe un segmento de la población que se encuentra abandonando el sistema tradicional de compra, un asunto que puede ser la punta del iceberg de cambios profundos en los patrones de consumo de las nuevas generaciones.

Analizando las pautas de comportamiento de los millennials, encontramos que los hábitos de consumo de este grupo han cambiado de forma drástica, lo cual pudiera convertirse en impulso para el cambio en la operación de los supermercados.

¿Cómo los millennials han cambiado la forma de vender alimentos y bebidas?

Este grupo etario representa una de las masas de consumidores más incomprendidas por las marcas en todo el mundo, además está ejerciendo una presión enorme en los establecimientos de todo tipo, con especial énfasis en aquellos que distribuyen alimentos y bebidas.

Ellos, no solo consumen de una manera diferente, sino que sus hábitos están creando una tendencia que se está trasladado al resto de la población, cosa que tiene en alerta a diferentes sectores y ha hecho que muchos negocios tengan que adaptarse, renovarse o desaparecer, como recientemente le ocurrió a las cadenas de restaurantes de comida rápida.

Los locales de fastfood eran de los sitios más populares en lo referente a restaurantes en España, sin embargo, una gran crisis se generó cuando los millennials comenzaron a rechazar en masa las propuestas de comida poco saludable. Es entonces cuando notamos que es la alimentación el sector donde los hábitos de consumo de este grupotienen mayor impacto.

Renovarse o desaparecer

El patrón de consumo de los millennials es muy diferente que el de sus padres y abuelos, lo cual ha llevado a las marcas y establecimientos a renovarse para poder continuar existiendo.

Los jóvenes ya no van al supermercado, principalmente porque prefieren aquellos establecimientos que tienen un formato online, además prefieren comer fuerao pedir comida por medio de internet.

La proliferación de aplicaciones móviles y servicios de delivery, ha hecho que ir personalmente a hacer la compra sea un asunto casi obsoleto. Cuando van a los establecimientos, igualmente causan tendencia; son los responsables de que el consumo de productos orgánicos haya aumentado, así como de la desestacionalización de las compras, convirtiendo cualquier día y hora, en buena para ir al supermercado.

Las multinacionales se adaptan

Pensando en las costumbres del nuevo grupo que marca tendencia, muchas empresas y marcas multinacionales han intentado adaptarse. En ese proceso, algunos supermercados han optado por realizar la compra de pequeñas marcas que han tenido éxito entre los millennials, aprovechando estos espacios para posicionarse en el segmento de una manera creíble.

Llegar a este grupo no es tarea fácil. A un millennial no le gusta ir a hacer la compra, no quiere perder el tiempo en el supermercado, y solo acudirá a ellos en busca de productos específicos, como todo lo asociado a lo gourmet, orgánico y mercadería de temporada.

No se trata de asignar culpas, sino de entender que son los protagonistas de un cambio cultural importante, al cual es necesario adaptarse.