La cantidad de leche vegetal que se puede encontrar hoy en cualquier supermercado, hace que nuestros clientes tengan una difícil decisión cuando están delante de los estantes, soja, coco, almendra, …, todas parecidas pero ¿iguales?
Esta gran variedad es la consecuencia de una popularidad que ha crecido en los últimos años de una manera desmesurada y que no parece que vaya a detenerse.
La leche vegetal es un producto vegano, pero que no tiene por qué ser consumido solamente por quienes optan por este tipo de alimentación, sino por cualquiera que esté interesado en probar algo diferente y sano.
Leches vegetales, ¿solo para veganos?
Sin duda, la respuesta es no.
Este tipo de leche que se produce a partir de fuentes vegetales como almendras, soja, coco, avena, entre otras, llama a pensar que solamente se dirigen a ellos, pero precisamente ese origen hace que sea adecuada, además, para quienes buscan opciones más saludables y sostenibles.
Para que los conozcas, te vamos a dejar los principales beneficios que tiene el consumo de leche vegetal.
Beneficios de la leche vegetal
Hay unos cuantos, que la hacen una alternativa muy adecuada para variar en tus desayunos, o en tus preparaciones culinarias a las que quieres dar un sabor diferente.
En primer lugar, son, naturalmente, libres de lactosa, la mejor opción para quienes son intolerantes a ella, que, como los veganos, pero por diferente motivo, no pueden tomar la leche tradicional.
Además, la mayoría son bajas en calorías y grasas saturadas, muy adecuadas también para quienes están realizando dietas para bajar de peso o quienes sufren algún problema cardiovascular.
Una duda que seguramente ronda por la cabeza de muchas personas antes de dar el paso, y probar una nueva bebida, es si cuentan con nutrientes suficientes, la respuesta en este caso es sí.
Su contenido en Calcio, vitamina D, vitamina B12 y proteínas vegetales, la convierte en una excelente alternativa a la leche de vaca, y no nos quedamos ahí, sino que, el estar libre de productos animales contribuye a la reducción de la huella de carbono y consumo de recursos naturales, en definitiva, se ayuda a proteger nuestro planeta.
Todo esto hace que, de una manera muy rápida, esté consiguiendo un puesto en los lineales de los supermercados, y sea tu oportunidad de ofrecer una forma diferente de tomar leche a tus clientes.
Cómo las bebidas vegetales están ganando terreno
En los últimos años, seguro que te has dado cuenta de este fenómeno tan llamativo en el mundo de la alimentación: el crecimiento exponencial de la popularidad de las bebidas vegetales.
Una de las razones principales detrás de este aumento en la demanda es el cambio de hábitos alimenticios hacia opciones más saludables y sostenibles.
Cada vez más personas buscan reducir su consumo de productos de origen animal y optar por alternativas vegetales, ya sea por razones de salud, éticas o medioambientales.
Esta demanda ha “obligado” a los consumidores a contar con ellas, de hecho, cada vez, con más variedad, ya no se limitan a un solo tipo, sino que ven en los estantes de los establecimientos una exposición que permite elegir con facilidad.
Esta facilidad de acceso impulsa esa popularidad, además de sus conocidos beneficios para la salud, con un impacto positivo en nuestra salud a largo plazo, que no pasa desapercibido por los consumidores habituales de bebidas lácteas.
No menos importante es su versatilidad en la cocina, ya sea en batidos, postres, salsas o, simplemente, como alternativa a la leche con cereales de cada mañana, las opciones son infinitas cuando se trata de incorporar bebidas vegetales en las recetas diarias.
Después de estos beneficios tan generales, vamos a hablarte de los tipos que, hasta ahora, son más populares y consumidos, y así facilitar la difícil decisión que hay que tomar ante la cantidad de leche vegetal del mercado.
Leche de soja
Quizás, la que inicia esta marabunta de leches vegetales, la más conocida, por lo menos hasta ahora.
Una excelente fuente de proteínas de alta calidad, contiene todos los aminoácidos esenciales necesarios para una dieta equilibrada.
Rica en Calcio, Hierro y vitamina D, nutrientes importantes para la salud ósea, la función inmunológica y la energía necesaria para el buen funcionamiento del cuerpo humano.
Uno de los beneficios más destacados de la leche de soja es su capacidad para reducir el colesterol LDL, o “colesterol malo”, consumir leche de soja de manera frecuente ayuda a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
En la cocina también es ya bastante habitual, batidos, postres, salsas, … aporta cremosidad y suaviza el sabor del café o del té.
Leche de coco
Sabor diferente y exótico, sin duda, un toque delicioso a muchos platos que van desde curries hasta postres, a los que da una textura cremosa.
Libre de lactosa y gluten, la elección ideal para quien no solo no toma leche, sino que es intolerante al gluten.
Rica en ácidos grasos saludables, como el ácido láurico, con un efecto positivo para corazón y sistema inmunológico, además de minerales esenciales, como el potasio, el magnesio y el hierro, importantes para mantener la salud ósea, la función muscular, y la producción de glóbulos rojos en el cuerpo.
Leche de avena
Su sabor suave, y ligeramente dulce, la hace agradable para muchas personas, incluso aquellas no tan fanáticas del sabor de bebidas vegetales.
Su textura cremosa y su capacidad para espumar la convierten, por otro lado, en una excelente opción para agregar a café, té o batidos.
Baja en grasas saturadas y colesterol, fuente de fibra dietética, importante a tener en cuenta para unas digestiones más saludables.
Se puede utilizar como alternativa a la leche de vaca en prácticamente cualquier receta, desde horneados hasta salsas y cremas.
Adecuada no solo para quienes no pueden tomar lactosa, sino también para quienes no pueden tomar ni soja ni frutos secos.
La producción de leche de avena requiere menos agua y emite menos gases de efecto invernadero en su producción, algo que hace de ella una leche ecoamigable.
Leche de almendra
La última de las leches vegetales de las que te vamos a hablar.
Baja en calorías y grasas saturadas, como las anteriores, libre de colesterol y lactosa, con vitamina E, vamos, que es un poderoso antioxidante que protege las células del daño causado por los radicales libres.
Fuente de Calcio, y, además, vitamina D, que ayuda al cuerpo a absorber y utilizar ese Calcio de manera más efectiva.
Contiene grasas saludables, como ácidos grasos omega-3 y omega-6, imprescindibles para la salud de corazón y cerebro.
Fuente de proteínas vegetales que colaboran en la reparación y el crecimiento de los tejidos musculares, y mantienen una función inmunológica saludable.
Pues aquí las tienes, las bebidas vegetales más habituales en los supermercados, y ante las que los consumidores tienen la difícil decisión de apostar por una.
Contar con ellas es un punto a tu favor para acercarte a esos clientes que, ya sea por decisión propia o por salud, no pueden llevarse las bebidas tradicionales que, hasta ahora, llenaban los estantes
